Los estrenos de verano en 4DX: Twisters y Alien

¡Hola, friki de corazón! 

¿Qué tal el veranito? ¿Has podido descansar y disfrutar de tus hobbies frikis favoritos?. Si te soy sincera, yo no lo he aprovechado todo lo que me gustaría, pero no me voy a quejar 😀

Hoy te traigo una experiencia de cine que hará que te replantees cómo ver películas. Lo mismo ya has probado este tipo de cine, pero si no lo has hecho… ¡no esperes más!. Es sí, es caro de la “leche”, la entrada casi 15 euros.., así que si vas acompañado (que es lo suyo), prepara el bolsillo, e intenta ir ya cenado, para no picar con palomitas, jejeje.. 

Este verano fui a ver Twisters y Alien en una sala 4DX, aunque mi experiencia con esa sala, viene de un año antes, cuando fui a ver la última del Exorcista. Puedo asegurarte, que de un año para otro, esta sala ha mejorado muy mucho. Con el exorcista, quitando un par de gotas porque llovía, un aroma a desván viejo, y algunos movimientos exagerados cuando los personajes cogían el coche, no hubo mucho más que llamará la atención (salvo la buena compañía), o que invitara a volver a otra peli por ese precio. 

Pero… ¡Mamma mía! este verano con Twisters, fue una experiencia inmersiva total. Con decirte que salí con señales en los tobillos provocadas por las hojas y ramas que volaban y aterrizaban en mis piernas… Sí, ríete, pero lo que disfruté con esa peli, hizo que al mes siguiente repitiera, y fuera a ver el estreno de Alien. Podría describir la experiencia como montar en una auténtica montaña rusa, literal y figurativamente durante las dos horas que duraron las películas.

Twisters: Que comience la tormenta

Si pensabas que una peli sobre tornados no podía ser más intensa, es porque no la has visto en 4DX. Desde el momento en que empieza la tormenta, los asientos se movían como si estuviera en plena persecución de tornados con Helen Hunt (la antigua protagonista de la primera peli). El viento soplaba en la cara, en la nuca, y en las piernas y caían gotas de agua que te hacían sentir dentro del ojo de la tormenta (teníamos que habernos llevado paraguas, pensaba yo a cada rato). Y claro, cuando llegó el momento de la acción, las vibraciones de los asientos hacían que te agarraras a los brazos como si fueras a despegar. No me movía tanto desde que monté hace 20 años por última vez en el Dragon Kan.

Alien: Suspenso y sudor en cada movimiento

Luego, llegó el turno de Alien y, ¡ay madre mía! Si en la sala de cine normal ya te pones tenso, imagínate en 4DX. Los asientos se movían con cada giro de cámara, y cada vez que el Xenomorfo aparecía, sentías como si te respirara en la nuca. Los efectos de viento acompañaban el ambiente oscuro de la nave, y en más de una ocasión, te sentías atrapado con la protagonista intentando huir. Eso sí, con la cantidad de sustos y movimientos, salí de la sala con agujetas en los brazos de tanto tensar los músculos.

El frikismo llevado al siguiente nivel

Ver estas dos pelis en una sala 4DX no es solo ir al cine, es como si te metieran dentro de la acción. Así que, friki lector, si tienes la oportunidad de ir a una sala de estas, no te lo pienses dos veces. Porque, ¿quién no querría ser parte de la acción cuando se trata de tornados y extraterrestres?

Ahora dime tú, ¿ya has probado una sala 4DX? ¡Déjame tus experiencias en los comentarios y que la fuerza de la butaca te acompañe! Nos vemos en el próximo “Un Rincón para el Friki”.