Seguimos avanzando y abrazando mis Pérdidas, como tú las tuyas si así lo escoges a través de mis palabras.
Después de unos meses un poco revueltos a nivel familiar, desde el fallecimiento de mi madre en marzo.
Me está trayendo bastantes pérdidas de las cuales no era consciente que se iban a presentar ante mí, y sobre todo en mi interior.
Empezar a despedirme de las cosas de mi madre en la residencia, al principio parecía que no representaba tanto ya que lo hice enseguida después de su partida.
Me di cuenta al hacerlo que de forma externa parecía más fácil, aunque internamente me costaba poder soltar todas aquellas pertenencias que le representaban a ella. Su forma de funcionar y de vivir.
En el hospital donde trabajo me iban preguntando cómo estaba mi madre, ya que muchos no sabían aunque ella hacía unas semanas había fallecido, y me daba cuenta que cada vez que me preguntaban agradece a la persona que me preguntara, pero había en mi algo, otra vez a repetir la misma historia, de cómo fue, de cómo lo vivo yo, de cómo lo vivimos todos.
Hasta que hubo un día que me di cuenta, ¿qué es lo que te está molestando de todo ello? Que estoy viviendo, en algunos momentos pude darme cuenta que estaba cansada de repetir la misma historia, y de tener que explicar realmente cómo me siento ante ello, ya que la respuesta de casi todas las personas, antes que yo responda es lo siento, que esto lo agradezco, pero claro tienes que estar mal, era tu madre.
Aunque se haya marchado sigue siendo mi madre, siempre va a representar la madre que me dio la vida, y que estuvo a punto de dar su vida a cambio de la mía.
Sigo dándome cuenta que es como que desde fuera se nos pida que tenemos que estar mal por la partida de ese ser querido que se ha ido.
Mi respuesta muchas veces ante la persona que desea escuchar, es si en algunos momentos puedo estar triste, en otros por circunstancias que están apareciendo después de su partida, aparece enfado o rabia, y me permito sentirlo en mi cuerpo y manifestarlo para mí, aunque algunas veces cuando aparece lo último, los que están cerca reciben esa energía sin que esa sea mi deseo de manifestarlo, por tanto allí aparece una nueva Pérdida, es que estoy perdiendo mi centro por las circunstancias que se manifiestan en ese momento.
¿A ti te pasa igual?
¿Te ha ocurrido alguna vez?
¿Te lo Permites?
¿Te cuidas ante ello?
Pues yo procuro que no se manifieste con gran explosión fuera de mí, aunque como os cuento, en algunos momentos no lo consigo, como me digo yo, con todo lo andado y aún pierdes los papeles en algún momento, y como me respondo, sigo siendo una persona terrenal.
Sin darme cuenta en algunos momentos, me manifiesto como los demás esperan que lo haga y entonces vuelvo a darme cuenta, ya me he vuelto a perderme de mi misma, ya he vuelto a salir fuera de mí, lo que esperan los demás de mí.
Ahora tomo conciencia, que todo ese tiempo que invertía en ella, y todos sus temas, ahora son libres para mí, aunque muy bien aún no se gestionarlos a mi favor.
Esto me está dando una mirada del tiempo que había perdido de estar en mí, ya que estaba ocupada con ella.
Esto no quiere decir que me arrepienta de haber invertido ese tiempo, sino de haber sabido gestionarlo de una forma más adecuada sobre todo para mí.
He estado viviendo desde esas creencias que me fueron inculcadas desde niña, donde lo importante por encima de todo era has de estar al cuidado de los demás por encima de todo.
Todo ello me ha llevado a darme cuenta, que interiormente seguía con plena fidelidad a la familia, aunque me había perdido de mi misma.
Realmente ¿lo que yo deseaba era eso que me habían inculcado desde siempre? Me había vuelto a perder de mí, sin saberlo.
Realmente revisando la mirada hacia el pasado, y las elecciones realizadas conscientes o menos inconscientes, no creo que cambiaría nada de lo escogido, ya que sin ello, hoy no podría estar decidiendo conscientemente en conexión con mi corazón.
Por tanto aunque he podido darme cuenta de mis Pérdidas, gracias a ellas hoy puedo decir, ello me permite revisar lo vivido, y atender el presente de hacia dónde deseo seguir caminando ahora con mayor Libertad, y siendo consciente de mis elecciones conscientes.
No siempre después de una Pérdida, lo que acontece es doloroso, ni triste, sino que surge de allí la vida con algo maravilloso y yo me lo permito.
¿Qué haces tú después de una Pérdida?
Yo me permito mirar el lado que me impulsa a la vida en estos momentos, y para mí esto es muy importante.
Por tanto borremos que las Pérdidas solo traen situaciones malas, sino que traen grandes experiencias, grandes momentos de inflexión en la vida y que desde ellos podemos elegir desde el corazón, algo diferente.
Por tanto después de las Pérdidas pueden aparecer grandes Ganancias, encontrarme a mí.
Deseo que sigamos caminando junt@s ante las Pérdidas.
Comparte conmigo sobre ello.
