¡Llegan las navidades querida lectora! y parece que ayer estábamos en las vacaciones de verano!!
Detrás de las luces, las lentejuelas y nuestras mejores galas.
Detrás de muchas sonrisas de labios rojos …
Hay en muchas ocasiones sentimientos de tristeza y de melancolía.
Este ha sido para mí, un año de mucho aprendizaje sobre mí misma!
Me he dado cuenta de que con esclerosis múltiple y todo sigo siendo muy muy fuerte mentalmente! Y eso en parte me asusta..
Me asusta porque sigo exigiéndome demasiado y después mi compañera la esclerosis múltiple me deja k.o. por una temporada.
¡Me dan mucha pereza las navidades! ¡Todos los años! Quizás influya que la cocinera oficial soy yo jaja.
Pero cuando toca quitar el árbol de navidad siento cierta tristeza, cierta melancolía, mejor dicho.
Yo cocinaré por la mañana para después poder dormir una siesta, me levantaré y me tomaré un té y por la tarde pequeños detalles de la mesa y a arreglarme.
¡Nada de cenar con el traje de cocinera! Ponte guapa para tí! Y cuando te veas al espejo puedes echarte un piropo (Es divertido y funciona! ¿qué más quieres?)
Y me sentaré a cenar agradeciendo todo el aprendizaje y brindando por todos los logros y los éxitos que sé que están por venir.
Pero para contarte un poco más tenemos que leernos después de las fiestas!
¡Felices Fiestas!
Brindemos por todo lo bueno que está por llegar y por supuesto, ¡por nosotras mismas!
¡Gracias por estar al otro lado querida lectora!
¡No sabes cuantísimo te lo agradezco!
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