Jamás pensé que en pleno siglo XXI pudiera sentarme a escribir lo que, en algunas ocasiones, podría parecer una novela de ciencia ficción, pero nada más lejos de la realidad…
Aquí, en la soledad de mi piso, en uno de los días en los que no estoy con los amores de mi vida, mi hija y mi hijo, comienza mi aventura literaria. No espero que sea un Best Sellers, ni que la gente me conozca por ser la escritora de un blog que cambió a la humanidad… Pero sí espero ayudaros a muchas de vosotras que en algún momento de vuestras vidas habéis estado a punto de rendiros, porque lo que os venía encima, en ese momento, era una carga tal, que no creíais poder superarla.
En realidad, mi experiencia me dice que la mayoría de las mujeres hemos pasado por estos momentos, y que no sólo una vez, ni dos… Y que en la mayoría de las ocasiones, hemos podido superarlos y salir más fuertes. Cada una en su “grado”, en un mayor o menor riesgo “vital”, o con una mayor o menor “responsabilidad” a nuestro cargo, todas tenemos experiencias de vida que nos han hecho supermujeres. Aunque, por desgracia, de puertas para dentro, casi nunca nos hayamos sentido, o más bien, no nos hayan hecho sentir como tal.
Con 43 años, 2 peques de seis y cuatro años, dos operaciones, una prótesis de cadera, dos cesáreas, un aborto, una capacidad pulmonar de menos del 75%, una separación y divorcio, cuatro empresas creadas, de las que actualmente estoy al cargo de dos, y muchas cosas más que harían esta lista eterna, puedo decir que tengo bastante experiencia en tocar fondo y salir a flote. Pero lo que he pasado yo, lo habéis pasado muchas mujeres, muchísimas, que no tenéis la oportunidad de sentaros frente a un ordenador y plasmarlo para ayudar al resto.
Esta Plataforma no pretende ser una simple página de contenidos, donde os metéis de vez en cuando a leer lo que se publica y nada más… Me gustaría que fuera vuestro papel en blanco, vuestro altavoz, que podáis opinar con libertad, y contar vuestras historias. Yo seré vuestra pluma y vosotras mi inspiración. Quiero que formemos juntas la COMUNIDAD de MUJERES CUALQUIERA. Y que, aunque no podamos salvar el mundo, podamos mejorarlo.
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