¡Hola querida lectora,
Seguimos por aquí. A pesar de lo estresante que está siendo esta semana, sigo escribiendo. Me encanta esto, hablar un poco sobre mí y usarlo como método de enseñanza y desahogo.
Supongo que la tranquilidad no era algo que estaba previsto para mí por mucho tiempo. Recuerdo muy bien como una vez, en primero de la eso, nos fuimos a una excursión. Al no tener en esos momentos datos móviles, no me llegaban los mensajes, al volver a casa, revisé mi móvil para ver las fotos que habíamos tomado. Y qué sorpresa, al abrir el móvil vi como me empezaban a llegar mensajes. No tenía agendado el número, lo que se me hizo un poco raro, pero al ver la foto de perfil supe quién era: una compañera de clase. En ese momento no entendía muy bien qué pasaba y porque me había escrito. Pero al entrar en el mensaje me sorprendí.
Me había enviado un mensaje donde me decía que nadie me quería, que nadie lo haría, que mejor me matase porque nadie me soportaba, que sabían dónde vivía y no solo conforme con eso, también me insultaban y me decían que mis gustos musicales eran de lo peor. Recuerdo exactamente como me reí de eso, no me afectó, en absoluto, no me ofendí ni nada por el estilo, estaba normal, pero sabía que no me podía quedar callada, porque a pesar de que a mí no me afectara, no significaba que a otros no, tenía que hacer algo para asegurarme de que no lo volvieran a hacer.
Cómo mis padres no estaban, lo primero que hice fue mostrárselo a mi hermana mayor, ella me dijo que cuando vinieran mamá y mi papá, les mostrara eso. Eso hice, al llegar mis padres a casa, les mostré de inmediato eso. Ellos se preocuparon, pensaban que me había afectado y que estaba triste, pero sinceramente me daba igual lo que me dijeran, total, eran niñas infantiles que buscaban molestar a los demás y a mí no me interesaba seguirles el juego.
Mis padres al enterarse no dudaron en ir al día siguiente al instituto, porque lo que había sucedido había sido en horario escolar, solo que al no llegar el mensaje por falta de conexión parecía que había ocurrido cuando yo ya estaba en casa. Creo que ahí sí me empezó a importar, tenía miedo de lo que mis padres fueran a decir, en este tipo de cosas, ellos dos son personas diferentes, les gusta darnos protección.
Continuará…