Hoy, en el Día Internacional de la Mujer, quiero reflexionar sobre lo que significa ser mujer,
no solo en términos de logros y lucha, sino también en relación a nuestra mente y bienestar
emocional. Ser mujer no solo implica ser fuerte y resiliente, sino también ser consciente de
nuestras necesidades emocionales, de darnos espacio para sanar, para sentir y para cuidar
de nosotras mismas.
A menudo, las mujeres estamos acostumbradas a poner las necesidades de los demás
antes que las nuestras; es nuestro instinto de madre. Sin embargo, aprender a priorizar
nuestra salud mental es crucial para poder ser la mejor versión de nosotras mismas, tanto
para nosotras como para los demás. Comencemos a cambiar este patrón de pensamiento
que dice que pensar en una misma es egoísmo, porque no lo es, al menos cuando de
emociones se trata. Reconocer nuestras emociones, pedir ayuda cuando la necesitamos y
entender que no siempre tenemos que estar perfectas, es parte de nuestro poder. No
somos superheroínas, somos humanas.
Hoy celebro a todas las mujeres que, además de ser fuertes, también se permiten ser
vulnerables. Mujeres que no temen hablar de su bienestar emocional y que luchan por un
espacio donde su salud mental sea una prioridad. Porque cuando nos cuidamos a nosotras
mismas, podemos seguir avanzando y apoyando a los demás.
Hoy celebro a todas esas mujeres de mi familia y mis antepasados que han sido ejemplo de
fuerza, pero también de amor y valentía al cuidar de su bienestar, a veces sin pedir permiso.
Y es que hoy, la mujer tiene un papel fundamental en nuestra sociedad. La mujer de hoy no
es la misma que fue mi tatarabuela. Esto nos demuestra que no somos el sexo débil, sino
todo lo contrario. Hemos ganado nuestro lugar, un lugar que, por razones y mandatos
patriarcales, nos fue quitado. Emocionalmente somos fuertes, resilientes, y seguimos
demostrando que nada ni nadie puede detenernos cuando decidimos avanzar. Cada paso
que damos es un paso más hacia la igualdad, hacia un mundo donde nuestras voces y
derechos sean respetados, valorados y celebrados.
Felicidades a todas esas mujeres que hacen del mundo un lugar más justo, más fuerte y
lleno de amor. Hoy, y todos los días, celebramos ser mujer.. Que nunca nos falte el amor
propio, la valentía para seguir adelante y el reconocimiento que merecemos. ¡Feliz Día de la
Mujer!