Qué hermoso ver caminar por el pueblo a estas Mujercitas que se atrevieron a elegir: cosa que no todas nos permitimos.
De un comienzo entre armas, desfiles, botines, puestos de guardia, uniformes, siendo de la armada Argentina las dos. Una carrera Militar pero orientada a la salud y la otra infante de la Marina era su meta.
A un pie de cruzar el Mundo en la Fragata Libertad, con madurez emocional haciéndose fuertes, sabiendo escuchar sus corazones… eligieron caminar juntas, dándose cuenta que el dolor es la fractura de la cáscara que encierra el entendimiento y además las necesidades de las personas cambian, pero el AMOR no.
Actualmente las pueden ver , son dos duendes acompañados de Quichicientos cuatro patas. su trabajo actual, cuidar pasearlos, paseando alegres por las calles demostrando que nuestro cuerpo es el Arpa de Alma.